Quizá sea demasiado ambicioso: probablemente para llegar a los niveles emocionales de discursos como los de Kennedy o Martin Luther King habrÃa que haber vivido en los años 60 y haber defendido causas tan poderosas como «la libertad frente al comunismo» o los derechos de los negros. Y quizá haber tenido como logógrafo a un genio […]